viernes, 27 de marzo de 2009

Al comenzar las clases

Cuando, al cabo de un corto receso, comienzan las clases en las escuelas, colegios y universidades, el tiempo parece detenerse. Los adultos recuerdan los tiempos, buenos o malos, que pasaron durante sus años mozos. Los niños, en su mayoría, al principio refunfuñan por tener que levantarse temprano, pero, al reencontrarse con viejas o nuevas amistades, recobran la ilusión.

La ilusión nunca acaba, para el que ama la educación. Año tras año, dar lo mejor de sí a todos aquellos seres humanos con los que nos encontramos en el camino, entendiendo que la educación es un proceso que nunca acaba mientras vivamos y que todos los días tenemos algo que aprender, aun de la persona que parezca más humilde.

Estudiante: empieza con paso firme, organízate y aprovecha los más inolvidables años de tu vida. Que cuando tengas esos inolvidables relatos retrospectivos, no tengas nada de qué arrepentirte, entendiendo que pudiste haber hecho mejor las cosas y llegado más lejos.

Vive, ama, goza.